Dios es logico. Tan perfectamente lógico y absoluto en precisión que un simple vistazo haría que una criatura humana quedara tan embelesada con una experiencia tan inefablemente gloriosa que no sería capaz de hacer nada más que alabar a Dios sin cesar.
Hay seres increíblemente magistrales y purificados que pueden comprender la supremacía unificadora de Dios de una manera que el cerebro humano ni siquiera comenzaría a conceptualizar.
El cerebro es como una herramienta de ábaco. Puede realizar algunas funciones muy básicas, pero no puede asimilar ni contener sinfonías de orden superior ni genio prismático. Entonces, se escapa del ábaco por completo porque está más allá de su alcance.
- ¿Puede un empirista creer en Dios?
- ¿Cuáles son algunas cosas que hubieras hecho si no estuvieras obligado por tu religión?
- Si Dios puede crear una piedra tan pesada que Dios no pueda levantarla, ¿es Dios omnisciente? ¿Dios crea preguntas como estas para enseñar lecciones?
- ¿Es una religión inmune a las críticas, y todos aquellos que expresan sus preocupaciones son irracionales y fóbicos?
- ¿Es el argumento de que Dios es una existencia eterna prueba lógica de Dios?
Sin embargo, cientos, si no miles de NDErs y pacientes comatosos (y yo) … con el cerebro momentáneamente discapacitado, serán tratados a una realidad mucho más grandiosa con múltiples capas, coherencia absoluta y perfección maravillosa. ¡Es benevolencia al exponencial más alto, en categorías y direcciones que nunca has considerado!
Y nos encanta porque …
Bueno, retrocedamos y reconsideremos lo que es el amor. Todas las grandes filosofías y todos los escritos del mundo no pueden contener este misterio, a pesar de que el amor es un tema de infinita preocupación humana. Ningún poema, ninguna ecuación, ninguna obra literaria magnum ha sido capaz de encapsular su simplicidad absoluta.
Amamos la naturaleza, amamos la creatividad, amamos la confianza, amamos la buena comida, amamos el cálido aroma de la familiaridad, amamos la buena salud, amamos las fotos desde el espacio …
El amor es, en realidad, una expresión de esta perfección de orden superior. Si estamos vibrando cuerdas, cualquier cosa que toque armonía, resonancia, perspectiva multiplicativa, significado e integridad en nosotros, generará esos ricos tapices de sentimientos beatíficos.
(Por el contrario, cualquier cosa que induzca desorden, incoherencia y degradación generará antipatía y un sentimiento disfórico más grueso)
Entonces, en presencia de la Fuente de toda armonía, de fractales interminables de orden sublime y mil millones de direcciones en las que este poder irradia hacia afuera y transmuta todo lo feo en una disposición infinitamente perfecta, la fibra fundamental de nuestro ser no puede sino transformarse en el pura experiencia de amor. No será opcional, así como tampoco es opcional que la materia responda a las leyes gravitacionales. Es inherente a su creación estar sujeto a ese principio.
Mi querida alma, espero que llegues a conocer, más temprano que tarde, esta incomparable lógica suprema. Te va a encantar.