Quizás pueda responder mejor “¿cómo sabías que Dios tenía un plan diferente para ti?” porque estoy seguro de que hay formas únicas que Dios usa para cada uno de nosotros.
Después de muchos años de buscar seguir a Dios, descubrí que un cambio de dirección a menudo va precedido de una sensación de disgusto. Una inquietud que me hace buscar respuestas y observar con más cuidado que Dios hable o me dé pistas. A veces esto puede deberse al pecado en mí o al pecado a mi alrededor. En cualquier caso, necesito trabajar para resolver esto. Otras veces cuando sentí este desequilibrio que para mí han sido pistas para cambiar. O en el fondo un llamado a buscar más de lo que es cómodo en este momento.
Una vez trabajé con un visionario que le habló a la gente como si sus sueños fueran realidad, lo cual no era cierto. La gente me preguntaba qué estaba pasando, sabía que tendría que mentir o decir la verdad. Enfrentarlo no fue fácil, pero él era el jefe. Mi esposa me dijo “o te sometes a él o tienes que irte”. Una clara elección para mí de que Dios tenía otros planes. Lo superé.
En otra situación, tuve un ministerio maravilloso, pero sentí que tenía más que hacer o intentar para crecer en Cristo. Envié algunos currículums y comencé a escuchar. Al final se encontró una nueva dirección. Me estiró No había necesidad ni razón para cambiar, pero había una sensación de llamado.
- ¿Por qué Dios no hace algunos de los grandes milagros que solía hacer para probar su existencia de una vez por todas?
- Si Dios conoce el futuro, ¿no es imposible para él actuar como agente libre e intervenir en el mundo?
- ¿Alguien puede ayudarme a entender 2 Tesalonicenses 2: 11-12?
- ¿Tenemos que entender a Jesús antes de entender a Dios?
- Si los judíos creen en Dios y en Jesús, ¿cómo se sienten acerca de que Jesús fue condenado por su propia gente?
Escuchar la voz de Dios es algo aprendido y practicado. Requiere leer Su palabra, oración (un diálogo, que incluye escuchar y hablar), buscar consejos sabios y buscar pistas. Si lo hace, se puede escuchar la voz tranquila de Dios, y esa sensación de saber que algo va a cambiar vendrá.
Así es como me ha sucedido.