Nietzsche era mucho más científico de lo que la mayoría de los filósofos le dan crédito. Sin embargo, su ciencia no era empírica en el sentido estándar de la palabra. Fue en gran parte racional y matemático en terrible minimalismo de la misma. A menudo jugaba con la identificación de las condiciones previas necesarias de las actividades filosóficas y esta declaración es un excelente ejemplo de su visión:
Lo que quiere decir aquí es que la “Verdad” no está necesariamente disponible para nosotros de una manera sensata. Tal vez hay una cierta cantidad cuantitativa de Verdad en el universo, pero solo una fracción de ella es discernible a través del aparato que se nos da. Toda filosofía humana debe respetar esta idea, que solo está explorando este segmento conocido de la “verdad” y debe luchar por expandir incluso su límite actual para tratar de capturar más. Por lo tanto, la verdadera búsqueda del razonamiento humano es descubrir cuáles son nuestros límites. Hermosa en su economía, ¿no?