Aquí están las dos cuentas de creación más aceptadas con respecto a nuestro universo:
(1) La teoría del “Big Bang”: la creencia de que el universo se formó desde un punto de singularidad y se convirtió en la monstruosa extensión cosmológica de 186 mil millones de años luz que tenemos hoy. Gran parte de esta teoría se deriva de la teoría matemática y los modelos. La explosión masiva que envió partículas al exterior durante los últimos 13.800 millones de años ha dejado un eco llamado “fondo cósmico” que podemos estudiar y analizar con la tecnología actual.
(2) El “Nuevo Modelo de Ecuación Cuántica” NMQE es una variación del Big Bang en el sentido de que aplica términos de corrección cuántica para complementar la teoría de la relatividad general de Einstein. Esto se ajusta a la aparente ruptura de las leyes de la física justo en el punto de singularidad y teoriza que el universo no tiene principio.
… Entonces, como puede ver, incluso “Ciencia” no puede decidir cómo comenzó todo (o no). Una teoría es que todo comenzó desde un solo punto en el tiempo, y otra teoría es que siempre ha estado aquí.
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… En una buena nota, tenemos la versión bíblica (Génesis) que proporciona una versión poéticamente abstracta del origen de nuestro universo que cubre ambas teorías cuánticas extremadamente complejas de una manera más “fácil de entender”. La descripción de Génesis de la creación universal es la mejor manera de explicar todos estos números extremadamente grandes y modelos matemáticos complejos de una manera que los pastores de ovejas, los granjeros y los pescadores en los tiempos bíblicos podrían entender más fácilmente.