Eso depende de por qué estás visitando esos países. Si simplemente está disfrutando de las vistas, como un turista típico, considere que sus dólares turísticos (o libras, euros o lo que tenga) contribuirán al presupuesto y la economía de esa dictadura. En cuanto a contribuir a los ingresos de la población local, tenga en cuenta que en muchos de estos países el gobierno impone fuertes impuestos, tarifas, multas y otras sanciones costosas contra su propia gente, especialmente aquellos en la parte inferior de la escala económica. La única forma de evitar esto es elegir deliberadamente bienes y servicios del mercado negro, lo que conlleva un riesgo considerable.
Por otro lado, algunas personas participan en un tipo diferente de turismo, donde se conectan con personas involucradas en oponerse a la dictadura de su país, proporcionando recursos e información a dicha oposición. La desventaja, por supuesto, es el riesgo de arresto y peor, pero si uno está consciente y dispuesto a correr ese riesgo, la posibilidad de un cambio positivo mejora.