Política fiscal: ¿Deben comprometerse los principios para lograr soluciones o acuerdos?

A un nivel alto puede sonar agradable, pero su plan no es necesariamente consistente con la pregunta original. Primero, ¿este plan es neutral en cuanto a los ingresos? En el pasado se propuso tener tasas impositivas más bajas a cambio de menos deducciones de eliminación, pero la política siempre se ha interpuesto. Los demócratas se han opuesto regularmente a reducir los impuestos a los ricos y una tasa del 20% sería un recorte para algunos de los ejecutivos corporativos mejor pagados. Por el contrario, el Partido Republicano siempre ha llamado a gravar la rica ‘guerra de clases’. Algunos de los banqueros más ricos de Wall Street pagan el 20% ahora y pueden usar las deducciones fiscales. No digo que esto sea algo malo, pero ambas partes tendrían que comprometer sus principios.

Además, las deducciones como clase son negociables, pero individualmente generalmente son populares. Actualmente hay una deducción por gastos de adopción. Si vota para eliminar eso, su futuro oponente alegará que odia a los bebés. ¿Eliminar la deducción de donaciones caritativas? ¿Por qué odias los comedores populares y Dios (iglesias)? ¿Eliminar la deducción por intereses hipotecarios? ¿Por qué odias que los estadounidenses tengan casas?

En teoría, tu plan no es malo. En teoría, tienes 10 legisladores encerrados en una sala para elaborar un plan como este y no dejas que hablen con los medios hasta después. Luego, ambas cámaras del congreso votan sí o no sin enmiendas. De esa manera, nadie obtiene todo lo que quiere y tiene que tomar decisiones difíciles. En realidad, algún senador filtrará lo que propuso la otra parte y tratará de ganar puntos políticos. Si las tasas impositivas en el plan fueran neutrales en cuanto a ingresos, ciertamente podría apoyarlo, pero en el mundo real no hay suficientes políticos valientes en ninguno de los partidos para permitir que un plan tan controvertido llegue a una votación.