Esta famosa ilusión de máscara giratoria nos recuerda que, a veces, la INVERSIÓN de una cosa puede confundirse fácilmente con la cosa misma. Entonces, aunque el ateísmo y la religión son polos opuestos, al igual que el blanco y el negro, comparten algunas cosas en común que pueden llevar a la confusión. Puedo proponer los siguientes tres:
- Ambos abordan afirmaciones teístas. Pero a pesar de que se puede decir que el blanco y el negro abordan el mismo problema: los fotones de “densidad” producidos dentro del espectro visual, eso no los hace iguales, cuando ambos están en extremos opuestos.
- Ambos se basan en “sistemas de creencias”, al menos en algunos usos de la palabra. Por ejemplo, los teístas pueden experimentar asombro y asombro mirando a un bebé recién nacido, o los cielos de arriba, y CREER que estos sentimientos son evidencia de Dios. Los ateos experimentan la misma evidencia, en el sentido de que también sienten asombro y asombro, pero CREEN que son causados por otra cosa.
- Muchos creen que ambos tienen un gran impacto en el comportamiento “moral” de un individuo. Y dado que las listas de comportamientos correctos e incorrectos están en el centro de muchas religiones, cualquier otra cosa que pueda influir en nuestra determinación de lo correcto y lo incorrecto tiende a agruparse con las religiones.