¿Cómo puedo pasar de ser ateo a agnóstico?
Probablemente ya sea agnóstico, pero no lo tiene claro por una simple razón: hay dos definiciones competitivas de ateísmo y agnosticismo que están causando mucha confusión.
- Definición simple
- Ateísmo
“No creo en ningún dios y sé que no hay dioses”. - Agnosticismo
“No creo en ningún dios y no sé si hay dioses”. - Definición más precisa
- Ateísmo
“No creo en Dios”. - Agnosticismo
“No sé si hay dioses”.
Mientras que en la definición simple el ateísmo y el agnosticismo son incompatibles, en la definición más precisa no lo son, porque el ateísmo y el agnosticismo responden dos preguntas diferentes, el ateísmo uno de creencia, el agnosticismo uno de conocimiento. Es perfectamente razonable no creer en algo sin estar seguro de si uno está en lo correcto, hacemos esto todo el tiempo porque al final no podemos saber muchas cosas. Los fantasmas podrían ser reales, ¿no? Rechazamos la afirmación que son, pero podríamos estar equivocados al respecto. No podemos saber que no existen. Y esa es exactamente la posición que toma un ateo agnóstico cuando se trata de dioses. Podrían existir, pero no existe evidencia objetiva de que realmente existan, por lo que asumimos su inexistencia hasta que se proporcione evidencia. Lo más probable es que eso nunca suceda, pero aún así no es imposible.
Entonces, si no pretendes saber que no hay dioses, una afirmación tan irracional como la afirmación de que hay uno, ya eres agnóstico en la definición simple y ateo agnóstico en la más precisa.
- ¿Por qué hay tantos conceptos erróneos sobre los ateos?
- ¿Qué te hizo alejarte del ateísmo?
- ¿Las personas religiosas que son amigas de los ateos las ven en secreto como una causa perdida?
- ¿Cuáles son algunas inconsistencias en las diversas versiones y copias de la Biblia? ¿Cuáles son algunas cosas que están en conflicto?
- ¿Elijo la religión sobre mi felicidad?
El problema es que en el momento en que te identificas como ateo, mucha gente, principalmente teístas, asume la primera definición y con eso afirmas saber que no hay dioses. El punto es que casi ningún ateo realmente afirma eso, pero a los teístas les gusta asumirlo porque esa posición es mucho más vulnerable que el ateísmo agnóstico.
Así que identifícate como un ateo agnóstico y, si es necesario, explica la diferencia entre las dos definiciones diferentes. Si su oponente es razonable, aceptará su posición y comprenderá lo que quiere decir. Si su oponente insiste en que solo existe la definición simple y la más precisa está equivocada, lo que realmente me sucedió, le aconsejaría que abandone la discusión. Ese tipo de persona no quiere discutir, no quiere aprender, solo quiere tener la razón.