La mente humana no puede entender la idea de la ausencia de elección.
Los hombres y las mujeres buscan un significado, quieren experimentar emociones, amor y para eso necesitan algo desconocido.
Algunos sadus o monjes podrían desarrollar tal idea. Lo mismo sucede para las personas que sufren atrapado en situaciones imposibles. En un momento dado, cuando no ven ninguna forma de salir de él, pueden decidir aceptarlo tal como es, para evitar la locura o el sufrimiento excesivo.
Pero incluso en esas situaciones, esas personas considerarán, al final, la aceptación como decisión y la expresión de su libertad interior.
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Para la ciencia, el libre albedrío no es posible o al menos con nuestro nivel real de conocimiento, oportunidad y necesidad maneja el universo.
Sin embargo, para los místicos, en cada momento de nuestras vidas no hay un futuro, ni dos, sino una gran cantidad de futuros posibles, casi un infinito. Dios los arrodilla a todos con sus posibles consecuencias. Entonces, cuanto más cerca esté nuestro Dios, mejor entenderemos las consecuencias de nuestras decisiones y elegiremos aquellas que desplieguen efectos positivos para nosotros y para la gente que cuidamos.
Ahora hay tantas influencias ocultas cuando las decisiones que hacen que los pensamientos no son suficientes para dar una idea completa para decidir correctamente.
La búsqueda del significado del hombre
La respuesta de Roberto Vilar a ¿Cómo se conoce la voluntad de Dios?