¿Cuáles son las claves principales para una gran ética de trabajo?

Mi consejo principal es comenzar y disfrutar el proceso. Hay un gran libro que habla sobre cómo practicar (esencialmente cómo obtener una buena ética de trabajo) y resumiré algunos de sus principios más adelante en mi respuesta. Amazon.com: La mente practicante: Desarrollo del enfoque y la disciplina en tu vida eBook: Thomas M. Sterner: Libros

Básicamente, lo primero es dejar de tratar de motivarse … y simplemente hacerlo. La motivación produce pequeñas explosiones de energía en las que nos sentimos energizados. Eso suena genial ¿verdad? Pero quiero llamar su atención sobre la palabra CORTO. La motivación es lo que sentimos cuando miramos un video inspirador y queremos hacer ejercicio. La motivación es lo que sucede cuando un maestro nos anima y nos sentimos listos para enfrentar nuestros problemas. ¿Qué sucede cuando no vemos ese video o no tenemos al maestro? ¿Qué sucede cuando suena el despertador a las 7 de la mañana y lo único que quiere hacer es quedarse en la cama?

La respuesta es disciplina, no motivación. La disciplina se trata de sacar tu elección del asunto y simplemente hacerlo. No hay opcion. Cuando suena la alarma, comienzas a hacer ejercicio. En el momento en que vuelves de la escuela, comienzas a estudiar. Realmente no hay nada más. Entonces, ¿por dónde empiezas? Empieza pequeño. Digamos que parte de su ética de trabajo desea poder trabajar durante largos períodos de tiempo. El primer paso sería comenzar realmente. Entonces, la próxima vez que se dé una fecha límite, comience a trabajar. Desperdiciamos tanta energía en la ansiedad y nos preparamos para comenzar que la tarea se vuelve cada vez más desalentadora. A menudo, una vez que comenzamos, nos damos cuenta de que la tarea realmente no fue tan mala en absoluto. Así que solo comienza. Ese es el paso 1. Encontrarás que una vez que desarrollas el impulso después de comenzar, la disciplina comienza a tomar el control. 30 minutos de estudio se convierten en una hora. Comenzarás a quedarte absorto.

El siguiente consejo es disfrutar de su proceso. Aquí es realmente donde el libro que vinculé anteriormente golpea duro. Nos hemos convertido en una sociedad tan orientada al producto. Cuando empezamos a aprender un deporte queremos ser el próximo Ronaldo o Kobe Bryant. Cuando comenzamos a aprender un instrumento musical, nuestro objetivo es tocar bellamente las piezas más complejas. Esto nos pone en una mentalidad de odiar el viaje. CÓMO mejoramos no es importante, solo queremos mejorar y ser los mejores. Esto ya nos prepara para el fracaso. Cada vez que cometemos un error, nos regañamos por no ser los mejores, por no ser perfectos. En su lugar, intenta disfrutar el proceso. Olvídate del objetivo final y haz que tu objetivo sea mejorar un poco cada día. El resultado final vendrá solo, pero con esta mentalidad, cada día se convierte en una victoria personal. De hecho, disfrutarás practicando, en lugar de ser un trabajo pesado que debes soportar para llegar al paso final.

Una buena ética de trabajo realmente se reduce a hacer rodar la pelota y disfrutar de su vida en el momento. Te deseo la mejor de las suertes y recuerda, ahora es demasiado tarde. Empezar.