¿Debería el presidente de Siria, según la constitución de 1973, ser musulmán?

No.

La variante de la ideología Baath que se arraigó en Siria fue muy clara al declarar a todos los árabes como iguales, especialmente las “minorías”. La secta de Assad, los alauitas, ni siquiera eran reconocidos como chiitas antes de Jomeini, por lo que eran una minoría mucho más pequeña que los cristianos sirios. Por el contrario, Saddam en Iraq encarnaba una variante de la ideología de Batth que sostenía que, dado que la mayoría de los árabes eran sunitas, el líder tenía que ser sunita, aunque (¿irónicamente?) Los sunitas no eran mayoría en el propio Iraq.

Ambas cepas del baazismo no solo aspiraban a la unidad panárabe, sino que los gobernantes en nombre de esa ideología invariablemente reclamaban soberanía sobre todo el mundo árabe (como los taiwaneses sobre China continental). Las posiciones políticas nominalmente dentro del estado siempre estuvieron organizativamente subordinadas a una contraparte panárabe.

Sí, no fue antes de que Al-Assad le diera la vuelta al tener un influyente clérigo chiíta ‘Alsadr’ para emitir una ‘fatwa’ que cuenta a los alauitas como musulmanes.