Espero que haya muchos motivos, pero los tres que inmediatamente me vienen a la mente son:
- Interés académico. Las escrituras tradicionales son maravillosos artefactos antropológicos. A pesar de no creer o practicar ninguna de las religiones, un científico dedicado puede aprender mucho sobre la cultura y la sociedad humana a través de un estudio comparativo de las Escrituras;
- Búsqueda espiritual La mayoría de las personas, ateas o no, buscan paz interior y respuestas a preguntas existenciales profundas. Debido a que muchas personas afirman haber encontrado estos dones a través de varias escrituras, una investigación abierta necesariamente incluiría un estudio de las escrituras; y
- Refutación. Algunos vehementes antiteístas hacen un gran esfuerzo para refutar las afirmaciones religiosas. Para mostrar que las escrituras son defectuosas o incorrectas, deben ser deconstruidas y cuidadosamente analizadas.