¿Cómo se siente ser un hijabi en un país donde los musulmanes son minoría?

Se siente genial. No esperábamos eso, ¿verdad? Jaja. Dejame explicar.

He vivido en los Estados Unidos toda mi vida. Y supongo que se puede decir que los musulmanes son considerados un grupo minoritario. He usado el hijab desde que tenía 10 años, incluso antes de estar obligado a hacerlo. Es cierto que hay ciertos momentos en los que te enfrentas a preguntas falsas e histéricas, y momentos en los que te enfrentas a preguntas llenas de odio. Pero poder empujar y sentir la satisfacción de usarlo libremente es increíblemente genial. La cuestión es que algunas personas no entienden que no importa lo que digan, no importa. Porque definitivamente no me impedirá usar mi hijab. Puede ser un poco agotador, tener que superar todos estos obstáculos, sentirse solo, especialmente si está rodeado de una comunidad, escuela o área poblada en su mayoría no musulmana. Sin embargo, los obstáculos retratados en los medios y otras redes sociales están disminuyendo lentamente. Día a día el hijab está siendo aceptado como algo hermoso. He tenido personas cercanas a mí, y personas que apenas conozco, quieren llamarlo hijab en lugar de bufanda. Raramente tengo gente que se me acerque y me diga: “Me gusta tu bufanda”. Conocidos y amigos que saben un poco sobre el Islam, ahora ven a mí y me dicen: “Me gusta tu hijab”.

Entonces hermana, gracias por preguntar. Creo que lo estamos haciendo bastante bien. Al menos mi vida ha sido tan buena hasta ahora, todo elogio debido a Allah, SWT.

Zalema

Vivo en Inglaterra en un área con muy pocos musulmanes. Yo era la única persona en mi clase que llevaba un pañuelo en la cabeza. Abrió una puerta para hablar de religión y me hizo sentir orgulloso de ser musulmán cuando la gente me preguntaba por qué lo usaba. También tuve la oportunidad de corregir los conceptos erróneos que algunas personas tenían sobre el hijab y decirles que nadie me obligó a usarlo y que me gusta usarlo. Pero lo mejor fue cómo el hijab me protegió de los pensamientos impuros de los niños. Si bien mis amigos solían recibir comentarios sucios sobre su apariencia y figuras, nunca lo hice y ningún hombre me miró de manera impura. Usar un hijab en la escuela fue la mejor decisión que tomé.

La mejor de las suertes,

Sidra