Me imagino que no lo consideran por varias razones.
- Los mercados no tienen moral. No realmente. “El precio más alto que tendrá el mercado” no es un axioma moral. Entonces no puedes depender de la mano invisible de la economía para ser un dios benevolente.
- Las tendencias en un mercado son promedios estadísticos y no garantizan beneficiar a ningún individuo en particular. (Si tengo un millón de dólares y usted no tiene ninguno, entonces nuestra riqueza promedio es de medio millón cada uno. Ese medio millón no le comprará una taza de café. Compare el “PIB” con medidas de desigualdad de ingresos y brecha de riqueza para ver cómo los economistas reconocen la debilidad de los promedios nacionales como una imagen de la economía).
- Algunas personas no pueden participar en el mercado. Hay personas con discapacidad física, mental y emocional. Hay personas discapacitadas por su plena participación en la economía por raza, género y otras categorías.
- Las personas que sostienen que un mercado libre elevará el nivel de vida de todos, incluidos los más pobres, pueden estar aferrándose a la idea de una economía lenta. El Papa y el FMI están de acuerdo en que esta teoría no funciona para los pobres (economía por goteo).
- Varias religiones tienen órdenes de tomar medidas directas y personales para aliviar el sufrimiento de los demás. Hay una responsabilidad de dar caridad en el Islam, por ejemplo, y Jesús ordenó: “Mateo 25:35 Porque tenía hambre y me diste algo de comer, tenía sed y me diste de beber, era un extraño y me invitaste a entrar ”