Es difícil saber dónde terminará su voluntad y dónde comienza. La verdad es que siempre haces lo que quieres, excepto cuando tu voluntad ha sido completamente abolida y te conviertes en un zombi, pero ni siquiera eres tú. Las personas, incluso las brujas, solo pueden convencerte o convertirte en un zombi por medio de pociones (me viene a la mente el toloache mexicano, pero hay muchas cosas en el mundo de las plantas que pueden lograr la función), en ningún caso TU voluntad se verá afectada. O estabas convencido, de cualquier manera necesario, o ya no eres tú quien está siendo controlado, sino solo el caparazón que solía ser tu cuerpo.
Por cierto, las personas pueden usar medios muy desagradables para convencerte (todos lo hacemos a veces, no solo las brujas) como chantaje emocional o amenazas, incluso patrones lingüísticos complejos para hacerte creer o aceptar algo (Johnnie Cochran era un maestro de eso) ) pero su fuerza de voluntad no se ve comprometida.
El libre albedrío es divino y no puede ser revocado.