El principal informe de los medios occidentales sobre China es la propaganda. China es retratada como malvada y es considerada como un enemigo potencial en Occidente. Los medios de comunicación occidentales no se hacen responsables de las consecuencias del informe y del problema social que el informe pueda provocar. Por ejemplo, el gobierno chino no puede ir a los Estados Unidos y demandar a CNN por un informe falso sesgado sobre Xinjiang. La cobertura de los medios occidentales en China podría no ser una mentira total, pero claramente los medios occidentales pueden escribir a voluntad por su propio interés.
Al informar problemas similares en otras naciones (especialmente en los países de la OTAN u otros países donde su gobierno / multinacionales tienen suficiente interés), los medios deben ser cautelosos con lo que escriben porque un informe inapropiado podría arrastrarlos a una demanda u otros problemas.