Si. Pero de qué manera depende de qué país musulmán:
- En Indonesia me sorprendió el tráfico
- En Malasia me sorprendió lo bien que la gente hablaba inglés
- En Brunei me sorprendió que la lancha rápida pasara por el territorio de Malasia sin pasar por la aduana en lugar de pasar por Brunei.
- En Kazajstán me sorprendió que el ruso sea más hablado que el kazajo, incluso entre los kazajos étnicos.
- En Turquía me sorprendió saber que todavía es ilegal decir algo malo sobre ese dictador muy impulsivo, mujeriego, Mustafa Kemal Ataturk.
- En Siria (antes de la Primavera Árabe) me sorprendió ver fotos del joven presidente de ojos azules Assad en todas partes.
- En Jordania me sorprendió que puedas pasear por los pedazos superiores de Petra sin barreras y particularmente en Little Petra que puedes escalar por todo el lugar
- En Cisjordania me sorprendió que la gente pensara que el mundo exterior no escucha su versión de la historia.
- En Omán me sorprendió la amabilidad y la tranquilidad de la gente.
- En Dubai me sorprendió que los emiratíes todavía usen ropa tradicional a pesar de ser una minoría distinta en su propio país.
- En Sharjah me sorprendió lo diferente que es de Dubai
- En Irán me sorprendió saber que Shi’a es completamente diferente de los sunitas, ¡y cuánto aman los iraníes las comidas campestres!
- En India siempre me sorprende todo. Pero aunque ese es el país con la tercera población musulmana más grande del mundo, es posible que no lo consideres un país musulmán. También me sorprendió notar la conexión histórica con Irán, que no había notado las primeras veces que visité.