Cuando ocurre la muerte, después de eso, ¿qué queda de esa persona en esta tierra?

Recientemente leí un pequeño escrito. Se lee como Dios, en traje de hombre, despertando a un hombre dormido y cuando se despertó pidiéndole que lo siguiera (Dios). El hombre preguntó por qué debería venir y dónde. Dios respondió que su tiempo se acabó en la tierra y que debe dejar su lugar con él sin perder el tiempo y agregó que todas sus pertenencias se guardaban en una caja. El hombre le pidió a Dios que se llevara con él el dinero, el oro, el diamante y las joyas que guardó durante muchos años, pero Dios le dijo que pertenecían a la tierra y que habían salido de la tierra, por lo que no puede llevárselos. Miró a Dios pálido y le pidió que permitiera que su esposa e hijos lo acompañaran, Dios se negó a decir que hizo una relación con ellos y que no eran sus pertenencias, por lo que no puede traerlos con él. Finalmente, aceptó ir con Dios. Mientras iba, el hombre le preguntó a Dios con curiosidad cuáles eran sus pertenencias guardadas en la caja. Dios abrió la caja y no había nada adentro. Sorprendido de ver la caja vacía, el hombre le preguntó a Dios: “¿No gané nada mientras vivía en esta tierra y nada me pertenecía?” Dios respondió que todos los momentos que disfrutó mientras vivía son suyos y nada más.

Después de la muerte, una persona deja sus recuerdos y los momentos que disfrutaba solo y con los demás.

¿Qué sucede cuando una serpiente arroja su piel? Los restos mortales son enterrados o consignados al fuego; son devueltos a los elementos de donde provienen.

Pero esta no es la razón por la que uno nace como ser humano.