¿Por qué dejaste el Islam como una ex mujer musulmana?

Para mí, fue una combinación de diferentes cosas.

  1. Empecé a leer, realmente leí el Corán, Sirah y Hadiths en lugar de simplemente estar de acuerdo con lo que me dijeron.
  2. No vi ninguna coherencia en el Corán, y parecía referirse más a la Biblia que a ser un libro separado. Entonces comencé a leer la Biblia.
  3. Dios en la Biblia es muy diferente de Alá. Leí sobre el gran amor de Dios por nosotros, Dios que quiere una relación con nosotros y Dios Jesús dispuesto a asumir nuestros pecados. ¡Qué amor! No sumisión sino amor es lo que Dios quiere.
  4. Comparé la persona y la enseñanza de la Sirah y los Hadices con la persona y la enseñanza de los Evangelios. Me podría gustar la persona de Jesús. El otro no lo vi como hechos dignos de emular.
  5. Vi las enseñanzas sobre las mujeres en el Islam
    1. La mayoría de las personas en el infierno somos nosotros. Si….
    2. Somos considerados tontos y controlados todo el tiempo.
    3. “Paraíso” parece una fantasía masculina.
    4. Apenas se nos considera en el tribunal, tenemos menos derechos de herencia, matrimonio, etc.
  6. Comencé a estudiar historia y descubrí que durante doscientos años después de la muerte del profeta, no hay nada escrito que lo mencione, ni al Islam, ni a los musulmanes, ni al Corán. Incluso los llamados califas no lo mencionan. Las monedas acuñadas por el Imperio Árabe tienen la Cruz y las inscripciones latinas. La cúpula de la roca carece de orientación hacia la Meca
    1. Vi que el Sagrado Corán tiene muchas palabras del arameo, persa, griego, lo cual es extraño si no fue creado.
    2. El concepto del Sagrado Corán no creado viola a Tawhid.
    3. El profeta se menciona solo cuatro veces en el Corán y Jesús 24 veces. Y cuando se menciona a Mahoma, parece estar hablando de Jesús como Mahoma.

Todas estas cosas me hicieron cambiar mis creencias. Todavía no me atrevo a decirle esto a nadie o temo que mi familia me haga daño. Así que etiqueto una Biblia en árabe como otra cosa y no guardo rastro de mi cambio de creencia.

Sé que estoy siendo un cobarde y debería ser honesto sobre mi cambio, pero temo el dolor. Quizás todavía no estoy listo para aceptar una nueva fe, pero estoy seguro mental, espiritual y moralmente de que tenía razón en abandonar el Islam.