¿Es una vida futura una necesidad?

Sí, es una necesidad!

Considere la verdad a través del telescopio de la siguiente comparación. Estás viajando por un camino. Ves un caravanserai (una especie de motel) delante de ti en el camino, construido por un gran personaje para las personas que vienen a visitarlo. Se gastan millones en la decoración del caravanserai para que los huéspedes puedan disfrutar de su estancia de una noche allí, y para su instrucción.

Pero los invitados ven muy poco de esas decoraciones, las miran por muy poco tiempo; saboreando brevemente las alegrías de lo que se les ofrece, siguen su camino sin saciarse. Pero cada invitado toma una fotografía de los objetos en el caravanserai por medio de su cámara especial. Además, los servidores de ese gran personaje registran con gran cuidado la conducta de todos los invitados y preservan el registro. También verá que destruye todos los días la mayoría de las decoraciones valiosas y las reemplaza con decoraciones frescas para los invitados recién llegados. Después de ver todo esto, ¿quedará alguna duda de que el personaje que ha construido este caravanserai en el camino tiene viviendas permanentes y exaltadas, tesoros inagotables y preciosos, un flujo ininterrumpido de gran generosidad? Por medio de la generosidad mostrada en el caravanserai, intenta simplemente despertar el apetito de sus invitados por aquellas cosas que mantiene en su presencia inmediata; para despertar su deseo por los regalos que él les ha preparado. Así también, si observa el estado del hospicio de este mundo sin caer en la embriaguez, comprenderá los siguientes nueve principios:
• Primer principio: comprenderás que este mundo no existe por sí mismo, como tampoco lo hace el caravanserai. Es imposible que asuma esta forma por sí mismo. Más bien, es un hospicio bien construido, sabiamente diseñado para recibir la caravana de seres que constantemente llegan a prenderse antes de partir de nuevo.

Segundo principio: comprenderá también que los que viven en este hospicio son invitados. Son invitados por su Generoso Sustentador a la Morada de la Paz.

Amigo, si intentaste con los otros 7 principios, entonces puedo compartir el nombre del Libro.
Deseos de oro.