Hay varias suposiciones en su pregunta:
- Ser bautizado es necesario para la salvación.
- La Biblia dice que tienes que ser bautizado para ser salvo.
- El cielo es un lugar al que “vamos”.
Muchos otros han respondido (¡y bastante bien, añadiría!) Que el acto del bautismo es la confesión pública de tu fe en Cristo. Tienes fe primero; El bautismo se convierte en una manifestación física de su cambio interno. En cierto sentido, es como una ceremonia de matrimonio: primero tienes una relación y haces un compromiso, y luego hay un pronunciamiento público de ese compromiso. Es la FE la que mantiene unido el matrimonio, no la ceremonia real.
La segunda suposición de que la Biblia dice que DEBES ser bautizado para ser salvo intenta sacar algunos versículos fuera de contexto (Marcos 16:16, Hechos 2:38, etc.). Podría entrar en todos estos versículos individualmente, pero creo que pierden el punto principal:
La pregunta más importante para mí es la tercera: que el cielo es un lugar al que “vamos”. Este es un malentendido de lo que es la salvación. No es una recompensa por tomar la decisión correcta; es poder experimentar la presencia de Dios. ¡El cielo no comienza después de que muramos! ¡Es la experiencia de vivir en la presencia de Dios, comenzando ahora mismo!
- ¿Cómo esperan los cristianos disfrutar del cielo sabiendo que algunos de sus seres queridos están ardiendo en el infierno?
- Si se produjera el rapto bíblico, ¿qué tendría que hacer una persona atea para salvarse? ¿Sería capaz de entrar al cielo?
- ¿De qué manera hemos malinterpretado lo que dice la Biblia sobre el cielo y el infierno?
- ¿Los musulmanes hacen dawah por obtener múltiples de 72 vírgenes en el cielo por cada número de no musulmanes que logran engañar?
- ¿Cómo sería el cielo según el hinduismo?
Creo que en este momento solo vislumbramos el cielo, lo que Pablo describió como “ver a través de un espejo débilmente”. Pero un día descubriremos que, sea lo que sea el cielo o el infierno que hayamos experimentado en la tierra (ya sea viviendo con o sin la presencia de Dios en nuestras vidas), estará completo después de la muerte. Si has vivido tu vida con confianza y fe, ya has encontrado alegría, y se expandirá más allá de tu imaginación. Si has vivido en el egocentrismo, el miedo y el aislamiento, esa también será tu eternidad.