Algunos creen que han probado intelectualmente que Dios no existe. Algunos creen que han probado intelectualmente que Dios existe. ¿No están los dos equivocados?

En un sentido.

“Prueba” es una palabra fuerte. Implica que no puede haber dudas racionales, lo cual probablemente solo sea cierto en matemáticas.

Además, el debate sobre la existencia de Dios no es solo intelectual; También es espiritual. Dios nos ha dado una gran cantidad de evidencia intelectual de que Él existe, no lo suficiente para una prueba absoluta, pero como dije, eso solo es posible en matemáticas. Pero el corazón humano está naturalmente en contra de reconocer a Dios (al menos el Dios de la Biblia) y también hay un enemigo sobrenatural que está decidido a evitar que las personas reconozcan a Dios (de nuevo, al menos el Dios de la Biblia). Entonces, lo que parece un debate intelectual entre dos puntos de vista con evidencia casi igual (muy pequeña) es realmente una batalla espiritual en la mente de las personas entre dos fuerzas sobrenaturales opuestas. Un lado tiene abundante evidencia y el otro muy poco, pero la evidencia no es el único factor involucrado, y el lado con poca evidencia es el lado liderado por el Gran Engañador.

Al final, todos sabrán que el Dios de la Biblia es real, pero hasta entonces, tienes razón. Nadie puede probar, para satisfacción de todos los demás, su existencia o no existencia.

En mi experiencia espiritual, dos creencias en conflicto pueden conducir al mismo lugar.

Algunos creen que no hay Dios, porque todo se puede explicar científicamente. De hecho, toda la materia en el universo es solo diferentes formas de energía, originadas en el Big Bang, organizadas a través de las fuerzas de la naturaleza en átomos, moléculas y células. Los humanos son solo el resultado de esta organización, una consecuencia inevitable de la verdad sobre el universo.

Otros creen que hay un Dios, porque todas las cosas provienen de él. De hecho, toda la materia en el universo está llena de la energía de Dios, que se origina en una sola fuente sagrada de energía, manifestada a través de su voluntad en átomos, moléculas y células. Los humanos son solo el resultado de esta manifestación, una consecuencia inevitable de la verdad sobre el universo.

A los científicos se les ocurrió un “Big Bang” para comenzar todo. “Fue una gran explosión”. Sin embargo, ¿cómo surgieron los elementos que “crearon” la explosión? ¿Quién creó esos elementos? Luego, le dirán que “No necesita hacer esta pregunta, porque todo comenzó cuando comenzó el tiempo y fue cuando ocurrió la explosión … 🙂 Pero, sabemos que ESO NO ES LÓGICO … 🙂

Desde mi punto de vista, la primera ley de conservación de la materia / energía es el “núcleo” del conocimiento. Después de todo, es una “ley”, probada, probada y ungida.

Es decir: “La materia no puede ser creada, ni destruida. Solo se puede transformar ”. Lógicamente, ninguno de los dos“ creacionismo ”sigue esta premisa; ni “evolución” a través de la teoría del “Big Bang”. ¿Por qué? Simplemente porque no puede haber “creación” como algo existente de la nada.
Por lo tanto, es ilógico creer que ‘Dios’ puede crear materia de la nada, o que una explosión ocurrió hace millones de años; ocurrió ‘de la nada’. Simplemente irracional bajo “premisas científicas”.

Por lo tanto, bajo estas premisas; todos los pensamientos o filosofías religiosas que creen en un Dios que “crea” cosas son simplemente defectuosas. Del mismo modo, todas las teorías creen que las cosas “comenzaron” de manera aleatoria a través de una explosión; son defectuosos No hay lógica ni razón en esos argumentos cuando se usa una “ley” científica.
Por lo tanto, el ciclo del tiempo es la respuesta lógica para las cosas que siempre han existido. No hubo creación allí.

En este ciclo, la materia continuamente “se transforma” en otra cosa y, por lo tanto, es eterna. Sin embargo, esa transformación está destinada a repetirse de una vez solo porque la materia es finita. No puede haber transformaciones “infinitas” de la materia “finita”. (Es finito porque no puedo crear más materia de la nada de lo que ya existe).
Aunque hay “tiempo” en el ciclo mundial, porque la materia se transforma a través del “tiempo”, en realidad el TIEMPO NO EXISTE. Esta es la mayor paradoja de todas. La existencia del tiempo no depende del “tiempo en sí mismo” sino de nuestra experiencia basada en nuestra conciencia.

El tiempo no existe porque somos básicamente “seres inmateriales”, almas cuando estamos en esa conciencia. ¿Cómo sé eso? Porque si sé que hay un ciclo repetitivo de tiempo, entonces, he existido entre (antes y después de esta vida) en algún lugar. ¿Cómo sé que debo haber existido en algún lugar? Porque todo lo que existe es eterno, porque según esa “ley” científica nada puede ser destruido; pero solo transformado. Por lo tanto, cambiaré mi “forma” en otra cosa. Eso se conoce como “reencarnación”. Ese cambio se produce a través de una simple “causa y efecto”.

Entonces, Dios entra en escena al final del ciclo para eliminar la entropía en la conciencia humana. Dios crea el mundo a partir de sus pensamientos puros. Irónicamente, el corazón humano que sostiene este pensamiento puro crea el mundo de los no justos en un mundo interior justo, en consecuencia, el mundo materialista externo. Por la conciencia pura todo se puede transformar, incluida la mente y la materia humana.

En resumen, puede encontrar argumentos para ambos casos. No voy a colocar mi opinión personal en esto, pero encuentro que ambas partes tienden a ignorar los argumentos del lado opuesto de una forma u otra. No hay forma científica de demostrar que no hay un Dios. Porque, por un lado, parece ilógico que haya un Dios; pero por el otro, si no hay un bien de dónde vino el universo? Los ateos no pueden encontrar un argumento adecuado para esto, pero los cristianos simplemente dicen que Dios es el principio. Ellos, al menos, tienen una declaración para el comienzo del universo. El movimiento ateo no tiene un comienzo REAL.

Entonces, para responder a su pregunta, ambos están equivocados y ambos tienen razón, ya que no puede probarlo científica o intelectualmente sin ninguna duda.

Era ateo desde los 16 años cuando fui a la casa de mi pastor y le dije que me iba de la iglesia. Más tarde, la religión en mi placa de identificación fue catalogada como atea. Llevé a casa un problema serio de alcohol de Vietnam. Así es como lidié con el TEPT en ese momento y me permitió dormir. Después de diez años de muchos problemas, una vida sin alegría, un par de intentos de suicidio y docenas de intentos fallidos para dejar de beber, estaba en el fondo. Me uní a AA. AA dice “dios como lo entiendes”, así que pensé en DIOS como un grupo de borrachos. Funcionó por un tiempo, pero luego comencé a tener problemas, no beber, sino una vida sin alegría, sin amigos y sin éxito. Mi patrocinador dijo que debería rezar. Dije que no puedo porque soy ateo. Dijo que eso no importa, solo pon tus zapatos debajo de tu cama por la noche y mientras dices algunas palabras como si pudiera haber un Dios. Lo intenté y funcionó. He estado sobrio durante 40 años y he tenido una vida maravillosa. A pesar de muchos intentos, nunca he encontrado una religión o un dios. Pero hay algo sobre la oración y la meditación que funciona. Así que intelectualmente he concluido que en algún lugar al comienzo de los tiempos más allá de la ciencia y la religión, había un poder superior, una fuerza, un dios u otra cosa. Eso sigue funcionando para mí y planeo continuar de manera excelente.

No. No están los dos equivocados.

Voy a decir esto en negrita y todo en mayúsculas, y a pesar de lo impopular que es este punto, es cierto:

LA ÚNICA PRUEBA QUE NECESITA PROBAR QUE NO HAY DIOS NO ES LA PRUEBA DE DIOS.

Voy a decir esto de nuevo, pero con cursiva, porque vale la pena repetir …

LA ÚNICA PRUEBA QUE NECESITA PROBAR QUE NO HAY DIOS NO ES LA PRUEBA DE DIOS.

Las afirmaciones no falsificables (es decir, cosas que no puedes probar o refutar) se llaman historias o mitos, o simplemente mentiras (si se cuentan como una verdad). Nadie puede decir si alguna vez hubo un elefante parlante llamado Herbert que inventó la vasija de barro, pero si jurara que hubo un elefante parlante llamado Herbert que inventó la olla de barro, los historiadores me llamarían mentiroso. No hay evidencia de elefantes que hablen. No hay evidencia de un elefante llamado Herbert. No hay evidencia de que los elefantes tengan algo que ver con las ollas de barro. Simplemente nunca sucedió, es una ficción, una historia, y no importa cuánto lo crea, no importa cuánto lo crea alguien, no es cierto.

Ahora, nadie puede probar definitivamente que no es cierto, pero no necesitamos demostrar que sea negativo. Probar un negativo a menudo es imposible. Pero la ciencia (y todos los campos del conocimiento son ciencia) requiere evidencia para hacer un reclamo. La evidencia debe ser convincente, y el reclamo no puede extenderse demasiado. Podemos observar que los peces pueden respirar bajo el agua, pero sería incorrecto suponer que los peces respiran agua de eso. Decir que los peces respiran agua requeriría más evidencia.

CÓMO ESTO SE RELACIONA CON DIOS

Sabemos que el universo existe. Vino de … algo. Podemos ver que se está expandiendo, y podemos ver la radiación de fondo desde el punto del origen de esa expansión. Por lo tanto, podemos suponer que todo el asunto estaba en un solo lugar, y luego se expandió hacia afuera, a diferencia de una explosión (podemos reclamar un “Big Bang”). No podemos afirmar que “Dios existió antes y causó esto” porque no hay evidencia de eso (usted inventó Herbert nuevamente). Del mismo modo que sabemos que los peces pueden respirar en el agua, sabemos que el universo proviene de algo, pero al igual que no podemos decir que los peces respiran agua en base a eso, no podemos decir que vino de “x”. Más bien, lo que podemos decir es que “no hay evidencia, pero como la materia no aumenta o disminuye, entonces proviene de materia súper densa, no muy diferente de un agujero negro del tamaño de un universo, sin embargo, la física tal como la entendemos se descompone en algunos de estos condiciones y otras teorías pueden presentarse a medida que salgan a la luz nuevas pruebas ”.

Si alguna vez encontramos un esqueleto de elefante con ollas de barro tempranas y un horno, con una etiqueta con el nombre que decía Herbert, y un manual de instrucciones escrito con colmillos con inscripción cuneiforme sobre cómo disparar arcilla, Herbert podría considerarse como una teoría. Lo mismo ocurre con un mago mágico del cielo. Pero hasta que salga a la luz una sola evidencia, toda religión no es más que una mentira, un mito, un cuento de hadas.

Sí, ambos están equivocados.

El problema del “dios” no es un exceso de evidencia conflictiva, sino una ausencia total de evidencia objetiva. Un ateo apropiado no “cree” que un dios (o dioses) no existe; simplemente carecen de la evidencia objetiva para responder a la pregunta de la existencia de un dios o dioses. (Debo agregar aquí que la evidencia retórica no es evidencia; es simplemente un argumento de abstracciones.) La confusión está en la palabra “creencia” y sus variantes: la ciencia no es un magisterio que se suscribe a la creencia y, de hecho, evoluciona a medida que la evidencia evoluciona para respaldar la teoría (por ejemplo, no “creemos” en la evolución: tenemos evidencia que respalda la evolución como una teoría, y hemos adaptado esa teoría para acomodar nuevas pruebas: la hipótesis del equilibrio puntuado, por ejemplo, a diferencia de la hipótesis instructiva de Darwin, pero menos apoyada, original, “lenta y constante”, mientras que el creacionismo, y sus varios sinónimos falsos, carece del estatus de teoría debido a la ausencia de evidencia objetiva [la biblia no es, por cierto, evidencia , ni es la noción de que, debido a que algo es demasiado complejo para que uno lo entienda, debe ser la función de un ser inteligente y numinoso, lo que lo limita al ámbito de la fe y la creencia]). Para cualquiera que le ofrezca una comprensión absoluta de la ausencia o existencia de un dios o dioses, siempre debe pedir su evidencia, y debe ser escrupuloso al analizar su veracidad.

Sin embargo, puede ser importante recordar que la ciencia y la religión son cosas intrínsecamente diferentes: la primera es un mecanismo con el que examinar y describir el mundo, grande y pequeño, la última es una función de la psicología de adaptarse a nuestro entorno, en En otras palabras, el primero es (o debería ser) estrictamente analítico, el segundo mayormente intuitivo. Lamentablemente, ambos “lados” de este debate son intransigentemente ideológicos en su incomprensión (lo siento, ateos pugnaces, pero ya sabes quién eres), de ahí el mensaje que el difunto erudito Joseph Campbell intentó comunicar durante décadas: que la ciencia y la religión no son mutuamente exclusivos, siempre y cuando estén adecuadamente confinados a sus esferas de influencia, no han echado raíces; lo que no pudo comprender fue que estaba escribiendo para una audiencia sorda voluntariamente a la distinción …

Las afirmaciones hechas sobre la existencia de Dios son generalmente infalificables. Son amorfos e inconsistentes en el mejor de los casos. Intentar demostrar que Dios existe es como intentar clavar gelatina en un árbol. La idea de Dios de uno es muy diferente de la idea de Dios de otro. PERO tenemos que entender la “carga de la prueba”. La carga de la prueba establece que cualquier reclamo realizado sobre el mundo externo requiere evidencia. Y los reclamos extraordinarios requieren evidencia extraordinaria. Hasta ahora, nadie ha proporcionado evidencia científica suficiente para la existencia de una entidad sobrenatural. Ninguna. Por lo tanto, no tenemos que demostrar la no existencia de Dios más de lo que necesitamos demostrar la no existencia de unicornios rosas invisibles que viven en la parte posterior de la luna. Si hace la afirmación de “X”, es su responsabilidad demostrar suficientemente la existencia de “X”. El corolario es que cualquier reclamo hecho sin evidencia puede ser desestimado sin evidencia.

“Algunos creen que han probado intelectualmente que Dios no existe. Algunos creen que han probado intelectualmente que Dios existe. ¿No están los dos equivocados?

Bueno, tu pregunta está redactada un poco incómoda. La palabra “probado” es la palabra que me da dificultad; porque realmente no podemos “probar” nada si usamos la palabra como se usa comúnmente. En el mundo físico real solo podemos aplicar probabilidades a las afirmaciones epistemológicas. Nada es 100%, incluso nuestra propia existencia.

Entonces, si aplicamos esa advertencia al uso de la palabra “probado” en esta pregunta, entonces NO, ambas afirmaciones no pueden estar equivocadas.

Estas dos afirmaciones son mutuamente excluyentes y me sorprende que nadie aquí haya mencionado eso (aunque no he leído todas las respuestas).

Solo hay dos explicaciones posibles. Esto puede considerarse una verdadera dicotomía, todo surgió sin querer (Naturalmente) o intencionalmente (sobrenaturalmente).

Esto nos da una disyuntiva de plausibilidad tal que:
Ui v ~ (Ui)
(Universo previsto o Universo no previsto)
Ya sea por casualidad, como una fluctuación cuántica = No intencionado
O por Dios = intencionado
La única otra opción sería suspender el juicio sobre la disyunción.

Una vez que una persona ha elegido el lado disyuntivo con un agente sobrenatural y proclama por fe la existencia de Dios, generalmente se le otorgan numerosas cualidades, rasgos de carácter y atributos.

No podemos saber con certeza que Dios existe. Nada de lo que sabemos sugiere que lo hace y los argumentos que afirman su prueba tienen poco significado lógico.

También es cierto que no podemos probar con certeza que Dios tampoco existe, pero la carga de la prueba recae en aquellos que afirman que sí. Es el principal inquilino de la honestidad científica no afirmar saber lo que no sabe y cualquier hipótesis empleada debe ser comprobable.

Se han tomado algunos comentarios de mi respuesta:

La respuesta de Rodney Wade Burke a ¿Cómo es la afirmación atea de que los dioses no existen un argumento lógico, ya que el conocimiento científico es inherentemente limitado?

De ningún modo.

Mire la siguiente declaración de Santo Tomás de Aquino, una de las mentes más grandes que la tierra ha conocido (al menos según las fuentes que afirman que es):

Declaración 1: El “argumento de la primera causa”:

– Es imposible que una cosa sea la causa de sí misma.

– Si algo es causado por otro, entonces estas causas deben volver al infinito, o debe haber una primera causa no causada que comience la cadena de causas en el universo.

– No es posible que las causas vuelvan al infinito.

– Por lo tanto, debe haber una Primera Causa, que todos llaman “Dios”.

Lo siguiente está tomado de otra fuente que busca refutar la declaración anterior.

Declaración 2: Contraargumento:

Si el Universo tuvo una primera causa, ¿qué causó esa primera causa? Es injusto argumentar por la causa de cada cosa, y luego argumentar por la única excepción de una “Primera Causa”, que no tenía una causa.

Ambas declaraciones utilizan argumentos intelectuales para demostrar que Dios existe y no existe. Ambos argumentos son poderosos sobre la base de que simplemente no poseemos suficientes datos para hacer una declaración objetiva respaldada por evidencia real.

Dudo en mi vida si tendríamos la evidencia científica para probar o refutar la existencia de Dios, pero hasta entonces esperemos que todos vivamos juntos armoniosamente … ateos y teístas …

Paz…

Bueno, ambos están equivocados por diferentes razones. Primero, no puedes probar que algo no existe. Ni Dios, ni el Monstruo Espagueti Volador, ni los unicornios, los vampiros ni nada que uno pueda imaginar. Eventualmente, puede suponer que no existe debido a la falta de evidencia de que sí existe.

Por otro lado, probar que algo existe requiere evidencia. No existe una “prueba intelectual” de algo, esto se llama teoría, y es solo un paso para probar la existencia de algo (el bosón de Higgs siguió siendo una teoría durante décadas, sin importar cuánto tuviera sentido para que la partícula existiera , era solo una teoría hasta que realmente se detectó recientemente).

Depende de lo que quieren decir con “dios” y qué estándar están utilizando para “prueba” y para “existir”. No puede hacer declaraciones generales que cubran todas las pruebas posibles.

Algunas definiciones de dios contienen contradicciones lógicas, por lo que se puede demostrar que no existen en el sentido de que su existencia es una tontería lógica. es decir. un dios absolutamente omnipotente sería la inexistencia de esta manera.

Algunas definiciones son tan banales que la prueba de la existencia del dios es trivial. Por ejemplo, “dios es amor” o “dios es el sol”.

Es importante entender lo que las personas quieren decir con las palabras que usan.

Por lo general, alguien que dice que sabe que Dios no existe, cuando se lo presiona, califica para explicar que sabe de la misma manera que sabe que el hada de los dientes no existe. No pueden descartar absolutamente la existencia de un Hada de los dientes en todas partes en todo momento, pero ese no es el estándar habitual que usamos para determinar la no existencia.

Cuando alguien afirma que sabe que Dios existe, generalmente hace una declaración de compromiso emocional con el concepto, una declaración de un alto grado de fe.

Lo miro de esta manera. Digamos que estoy tomando la decisión de volar en un avión. Necesito pruebas de que el avión, hecho de metal y obviamente muy pesado, no se estrellará contra el suelo.

Obviamente, no puedo tener “prueba” como en una prueba matemática. Pero puedo estar bastante seguro de que la probabilidad es menor de 1 en un millón o más de que se bloquee, según las estadísticas que puedo leer, y de tener cierto grado de confianza en las fuentes de las que puedo leer, y así sucesivamente. Esta es mi vida aquí, no quiero estar equivocado, pero solo puedo estar “bastante convencido” de que aterrizará de manera segura. Simplemente no puedo estar 100% seguro. Podría ser desafortunado y podría suceder un extraño accidente, o tal vez todas las fuentes me están mintiendo y es mucho más peligroso de lo que dicen. O algo.

Así es como veo la posibilidad de que haya un Dios. Especialmente si estamos hablando de un Dios que me desterrará a sufrir en el infierno por la eternidad si no creo en él … Me gustaría estar al menos tan convencido como estoy con el avión. Puedo ver la evidencia, la falta de evidencia, compararla con otras religiones históricas que asumimos que son falsas (dioses griegos, etc.), ver cuán crédulos son las personas incluso hoy en día con tantas herramientas más para aprender la verdad, y etc., y puedo hacer una estimación de cuán probable es que tal Dios exista o no.

Concluyo que es altamente, muy poco probable. En cierto sentido, lo considero “probado” para mí mismo. De la misma manera que decimos que un caso criminal está “probado” en la corte … todavía no puede saber con certeza si el profesor Plum mató al Sr. Boddy con el candelero, pero podemos decir que está “probado” si a través del debido proceso observamos con suficiente atención la evidencia y los diversos argumentos, y estos lo sugieren con suficiente fuerza.

Creo que eso es cierto en el caso de Dios (*) no existente.

Tenga en cuenta que sería menos probable que use la palabra “prueba” si estoy hablando de demostrarlo a nadie más que a mí mismo. Y en general no uso la palabra “prueba” de todos modos, solo digo que estoy convencido, y si empujas, te daré mi probabilidad estimada de que Dios no exista. (algo así como 99.999%)

* cualquier tipo de Dios tradicional de todos modos. Si quieres definir a Dios como la naturaleza o el universo o el amor o lo que sea, entonces es un asunto diferente.

Sí, ambos están equivocados. En este momento no hay pruebas de ninguna forma de deidad, ni pruebas de que no pueda haber dios.

Creer en un dios es fe, lo que significa que asumes que es tu dios, porque así es como te sientes. La educación es parte de esto. Cosas como “el universo está creado, por lo que debe haber un creador” o “somos tan buenos, por lo que debemos ser creados” no son prueba.

No creer en un dios es en parte porque la realidad que te rodea no parece implicar una intervención piadosa y en parte porque el dios que fue parte de tu educación no tiene sentido. Por supuesto, no puedo hablar por todos los ateos.

Gran parte de la diatriba dada aquí no tiene sentido ni efecto. Y las suposiciones de que no puedo “probar” que existo es solo un pensamiento falaz. Todo esto se puede dividir como comprender la diferencia entre “creencia” y “ciencia”.

Si hay una teoría científica que es generalmente aceptada, y surge evidencia que muestra que hay problemas con la teoría, entonces la ciencia requiere que la teoría sea modificada o reemplazada por una teoría que incluya tal evidencia.

Si existe una creencia religiosa que tiene evidencia de que está en conflicto con el dogma de esa religión, entonces esa evidencia debe ser negada o rechazada para proteger el dogma.

Finalmente, en palabras de C. Hitchens, “Lo que puede afirmarse sin evidencia, puede negarse sin evidencia”.

Algunos creen que han probado intelectualmente que Dios no existe. Algunos creen que han probado intelectualmente que Dios existe. ¿No están los dos equivocados?

La creencia no es prueba. Como no puedes probar un negativo, la única forma de probar que Dios existe es encontrarte con Él. El intelecto puede ser útil para formular su introducción a Dios. La teoría de la sincronicidad de Carl Jung es muy buena en eso. Para ver su aplicación directa, lea la introducción de Jung a la traducción de Richard Wilhelm del I Ching.

¿Ha aceptado el mundo ampliamente su punto de vista sobre la existencia de Dios? ¿No? Entonces nadie ha probado nada. Si lo hicieran, entonces el mundo se convertiría a lo que sea probado. Si prueban que Dios existe, entonces tendríamos el 99.99999 por ciento de la conversión atea. Si prueban lo contrario, entonces la mayoría de las personas que creían en Dios se convertirían en ateos.

Richard Dawkins, profesor de Oxford y conocido ateo, ha pasado décadas encontrando argumentos intelectuales para promover el ateísmo.

En su libro ‘The God Delusion’ admitió la derrota, diciendo en voz muy baja ‘Dios probablemente no existe’.

No siendo en absoluto famoso, ni un académico reconocido, dejé de intentar publicar mis pruebas de Dios hace años, incluso sin hablar de ellas durante casi dos décadas … pero seguían llegando más pruebas, como innumerables ideas sobre cómo mover la filosofía, las matemáticas y ciencia hacia adelante.

Quizás sea el momento de publicar.

No, no estoy equivocado.

No creo que sea posible demostrar que una deidad invisible no existe. Es el mismo problema con probar que no existen extraterrestres, ni unicornios rosados, duendes … o incluso Bigfoot.

Del mismo modo, no es posible probar que tal deidad EXISTE.

¿Por qué diría que Bigfoot, et al, no existe, en lugar de que no es razonable creer que existe?

El problema nuevamente es que puedes reclamar cualquier cosa real si la única base para creer en ella es que nadie ha demostrado que no existe. Esa lista podría ser muy larga.

Buena pena, aunque me encanta ser un poco snob intelectual y agitar mis credenciales académicas: no hay forma de que alguien haya demostrado la existencia de Dios de ninguna manera.

Los ateos trabajan sobre la base de: sin evidencia, simple. Sin evidencia, no comprobado tiene que ser el valor predeterminado.

El tío de mi esposo no era profesor universitario, pero era escocés y tienen mucha base, llamaría a esto “kidología”.

Como, ¿a quién tratas de engañar?